Será una de las jugadas más polémicas del año. El Barcelona goleaba al Celta en el Camp Nou y tenía un penal a favor. Leo Messi fue el encargado de ejecutarlo y automáticamente quedar en la historia por la definición.
El argentino decidió tocar a un costado en lugar de rematar al arco. Leo tocó despacio el balón y Suárez definió para aumentar la cifra en su carrera al Pichichi, algo que afecta directamente a Cristiano ya que compite con el uruguayo.
Y como era de esperarse, el portugués fue consultado por esta rareza en el partido del Barcelona. Con un mensaje directo a Messi, el luso confesó que el crack del Barcelona tiene un motivo para hacer esa jugada, aunque no lo dio a conocer. Además, dejó a libre interpretación de los periodistas la razón que no quiso sacar a la luz.